"No somos enemigos, sino amigos, no debemos ser enemigos. Si bien la pasión puede tensar nuestros lazos de afecto, jamás debe romperlos. Las místicas cuerdas del recuerdo resonarán cuando vuelvan a sentir el tacto del buen ángel que llevamos dentro"
Últimamente me como el coco muchísimo, me he dado cuenta de lo afortunada que soy, ya que tengo cuanto quiero. Aún así, nunca nos conformamos, nos cegamos mirando desde el egoísmo, llevándonos por aquellos impulsos más intolerantes e infantiles que podemos mostrar. Es muchas veces causa de rabietas y riñas, que nos amargan el día por tonterías, haciendo hasta incómoda nuestra presencia a veces, cuando ambos sabemos que es totalmente inútil y efímero ese intento de retener lo que ralmente deseamos hacer, que es abrazarnos y comernos el mundo por lo pies.
TE QUIERO.
No hay comentarios:
Publicar un comentario